Prólogo de Crónicas de un buitre pensador

Por Cándido Torres

El libro Crónicas de un Buitre Pensador nace accidentalmente, tras la entrega de varias prácticas sabatinas en la asignatura la crónica, que se imparte en la carrera de Comunicación Social de la Universidad Dominicana O & M, a las que se sumaron otras historias extras hasta conformar el compendio.

El novel autor se inspira en las ciudades modernas, las tiras cómicas, los asesinos en serie, las películas de horror de las décadas de los 70 y 80 del siglo pasado, las artes marciales, el glamur de las discotecas, las drogas psicodélicas y anabólicas, el folklore dominicano, los libros de autosuperación personal, la sexualidad al modelo Segimund Freud y en las “actitudes” de adolescentes saturados de alcohol y reggaetón.

Asimismo, en los problemas sociales y económicos de Latinoamérica, las culturas Hippies, Glams y Hip Hop, en los textos de geografía e historia universal, la corriente filosófica del existencialismo, los criterios radicales de Friedrich Nietzsche y Jean Paul Sartre (sus máximas musas), las divas de Hollywood, la psicología contemporánea y, por supuesto, en el periodismo de investigación criminalística y policial.

Extraño, pero cierto, la obra es un breve relato de ciencia ficción que se desenvuelve tras la devastación que deja un fenómeno natural de carácter histórico como el paso del huracán George en 1998, donde se encuentra como una gran enseñanza que cuando la vida se está extinguiendo en la tierra hay señales que otras pueden aparecer en el amplio universo.

Es un libro en el cual cada historia deja una moraleja de aprendizaje, y está diseñado para toda persona que sin importar su origen busca la superación personal.

En este material el autor condena el racismo y piensa que en un mundo donde hay ambigüedad de géneros y razas se puede convivir conociendo las etapas del hombre en sí.

Plantea que la discriminación racial no es más que un absurdo sistema de ignorancia nacido de los estados primitivos de la religión cristiana y que en estos tiempos donde Barack Obama se convierte en el primer presidente negro de Estados Unidos, no debería existir.

No obstante, el autor tiende a ser poco flexible con la problemática de la inmigración masiva de haitianos, cuya incidencia puede causar choques culturales y dogmáticos con la nación dominicana.

Mientras la comunidad gay y los grupos feministas son marginados por diversos sectores moralistas, este libro contiene una franca apología hacia los homosexuales, bisexuales, transexuales, feministas, inadaptados y lesbianas.

Sostiene la creencia que estas personas en vez de ser excluidas merecen ser aceptadas, ya que su mundo excéntrico y a veces hasta colorido posee amplia creatividad en su naturaleza.

En cuanto a la violencia y la tendencia sanguinaria que quedan plasmadas en las líneas, no es una incitación al mal, sino un amplio reflejo de los problemas del diario vivir, ya que, retratando la tragedia desde el ángulo onírico y surreal, es la forma idónea de alcanzar la liberación individual en tiempos de crisis.

Por otra parte, aparece el estilo de diálogo spainglihs adaptado en las historias número 11 y 15 del libro, el cual no pretende destruir la esencia del castellano, sino que simplemente es una manera de enfocar cómo van evolucionando los lenguajes hasta trenzarse en una espiral llamada comunicación híbrida, en tiempos donde todo avanza a merced de la globalización.

En su pensamiento el autor intenta expresar su punto de vista de esta forma: “Estaba condenado a vivir dentro de un huevo lleno de dolor y angustia, pero el cascarón un día se rompió bruscamente y aquella piel helada se llenó de plumas haciéndome volar sobre las montañas y planicies, para desde la cúspide galantear a la belleza del mundo con mis auténticas feromonas y, a la vez, devorar toda esa carroña de la cual muchos prefieren el vaho inhalar, antes que ostentar desfigurarla”.

Y agrega, “siempre había pasado largo tiempo preocupado por los problemas del diario vivir y ávido de conocer el verdadero amor, aún navegando los manantiales del erotismo. Pero todo es hasta un día, puesto que cuando se abre la puerta a la imaginación y a los desórdenes mentales de carácter surrealistas, transformamos el amargo panorama en una trama que comienza, pero no termina, y si lo hace trae secuelas interesantes”.

Cada uno de los temas que contiene la obra deja una lección cargada de realidades y ficción, y nos adentra en cada una de ellas.

El buitre y yo somos la misma cosa, por ende, nací muerto y me moriré viviendo, por algo mi cabeza está al ras y muchas ninfómanas quieren cebarse en su desnudes, por un sano motivo escribo y por una desgracia leo, amo como cosa loca pero también mis afiladas garras saben herir cuando siento odio.

Es posible que tenga los sesos en mi parte baja y trasera y mi cráneo sea igual que un inmueble deshabitado, pero trato de que todo lo que digo señale lo que es posible en cuanto a cuestiones de fracaso y dignidad humana. Espero no ser tan explícito, pero ni mucho menos arisco, disculpen mi bondad y valoren mi perversidad plasmada en textos, pues buitre soy, animal me siento, pero, a la vez, razono y como humano siento.

Crónicas de un buitre pensador es una semblanza entre el bien y el mal donde sus protagonistas y antagonistas son personajes deformes y retorcidos que se desenvuelven en mundos concebidos por la imaginación de un autor creativo, que parte desde los rincones del existencialismo hasta dejarse caer en las sombras del anarquismo, tratando de elaborar una ácida sátira sobre la cruda realidad impuesta por la mayoría de escasa mentalidad y los excesos de glamour publicitario.

El buitre es la imagen simbólica del material literario, puesto que es un ave rapaz que se asemeja al instinto natural de un joven talento cultivado en la paradójica Quisqueya, donde son pocos los que conservan la sabiduría y muchos los que la adquieren, pero la dejan consumir en el vacío.

Cuando el buitre vuela lo hace en alto, así lo plantea el autor, manifestando la filosofía nietzscheana que desde la miseria se puede ascender a los méritos del superhombre, quien estará destinado a colaborar con la extinción de los parias y débiles.

También la mirada del buitre se convierte en el punto de vista de quien toma la pluma. Se observa con desdeño a los plásticos y desechables elitistas, a los ignorantes, a los tabúes mágico-religiosos, mientras que por un lado se elogian los avances de la ciencia moderna y las tendencias liberales que luchan tratando de abolir los criterios conservadores, por supuesto, siempre observando a una sociedad que se transforma en suciedad, ya sea por personas deshumanizadas o por otras que gustan de llevar la vida ajena.

El Hombre Buitre puede considerarse como la obra más representativa del libro, donde el autor, con su estilo periodístico, se pone en el traje del protagonista que también era periodista. Es un ataque dirigido con burla e ironía al estigma social contemporáneo, donde el héroe es antihéroe y hasta puede hacer de villano cuando su lado oscuro y animal se lo proponga.

La trama se desenvuelve en el ambiente nocturno y urbano de Santo Domingo y sus antiguos suburbios, con personajes vandálicos y atrevidos que parecen ser extraído del comic o de una vieja novela policíaca, donde un pajarraco es la evolución humana; caída, descascaramiento, ascenso, protección y engaño.

Paranoica Pesadilla es un tributo o elogio que el autor le hace al legendario escritor colombiano Gabriel García Márquez, a quien considera como una de sus grandes musas. La historia es una adaptación sintética y moderna de Crónica de una muerte anunciada.

Los Dueños del Circo y la Minusválida del Conde. La famosa calle de El Conde Peatonal da origen a una fantástica historia teatral que se desenvuelve en medio de un carnaval con elementos prehistóricos, científicos, dramáticos y hasta risibles que hacen del panorama un circo plasmado de invasión extranjera.

En La Mariposa, al igual que el Hombre Buitre, el personaje pasa de ser un superhéroe hasta convertirse en antihéroe, y esta vez toma el ambiente más animado de San Francisco de Macorís.

Cryptorchild es una imagen platónica de cómo el rechazo infantil y el libertinaje le dan oportunidad a la formación de pandillas juveniles y la confraternidad como forma de ayuda mutua ante el desamparo, la persecución y la marginación social.

La Momia y el Vampiro es notable el culto hacia las clásicas películas de horror, donde sus dos personajes principales muestran los paradigmas del pensamiento humano con una filosofía cargada de complejos y limitaciones que a cualquiera le podría pasar en la vida real.

Diario de un Amigo Depravado son las confesiones más morbosas y retorcidas de uno de los mejores amigos que el autor tuvo en la secundaria, quien viola su condición confidencial para transformar los problemas de alguien en una obra de arte que trasciende los elementos de la psicología humana y le recuerda a cada quien que tuvo una experiencia similar o conocía a alguien en esa situación.

En el segundo caso se ilustra la decadencia y la limitación mental de la cual no podría escapar la mujer moderna.

¡Apagón!: consiste en una comedia que hace una mordaz crítica a la deficiencia del sistema energético dominicano.

Psicopatología de un Buitre. Laury Berkowitz (la nieta de Sam) es la representación sádica de la mujer contemporánea que no escatima esfuerzo para exprimir a la figura masculina en todos sus parámetros y bajos instintos, dándose así la apariencia de buitre que como reza el viejo proverbio de que la mujer es un pájaro malo.

Otro elemento curioso es como el autor visualiza el futuro que de la noche a la mañana evoca el presente, y la existencia de una extraña ciudad donde sus calles y establecimientos hacen alusión a grandes asesinos en serie y sucesos trágicos de la historia. Destaca que el preludio es elaborado por El Barón del Lado Oscuro, seudónimo usado por el autor para leer crónicas de horror en la voz de las FF.AA (Hifa 106.9 FM), que no es más que la mitad siniestra de un dulce y tierno literato.

El Monstruo de la Laguna Verde y la Princesa Oligofrénica es una continuación de la historia número cuatro, donde las criaturas han evolucionado y se da una lucha entre el bien y el mal para determinar en manos de quien quedará el dominio universal, dejando entrever que el mundo no tiene dueños y está hecho para todos, aunque unos sobrevivan y otros no.

En esta obra abunda el glamour desmedido, las drogas, el surrealismo, la elevación literaria del satanismo como filosofía Laveyana, el fanatismo religioso, el caos, el machismo degradado hacia la liberación sexual sin control y la tendencia alcohólica e incoherente que caracteriza parte de la idiosincrasia dominicana.

Eva y la Manzana Envenenada, representa una parodia sobre el Génesis de la Biblia, donde sí se lee con cuidado se puede llegar a conocer el verdadero origen del hombre a nivel metafórico.

El Código de los Hiperbóreos es un híbrido entre poesía y narración, donde se le da vida a los atributos de la doctrina del superhombre de Nietzsche y a la minoría escogida, a través de una hueca y elevadora historia de amor.

Cárcel de Menores no es más que otra muestra de carácter social pero esta vez enfocándose en las precariedades y debilidades del sistema penitenciario dominicano.

Masacre en la Novia del Atlántico presenta un despiadado asesino en serie que siembra el terror en Santo Domingo, Barahona y Puerto Plata y oculta la malicia entre la doble moral y la apariencia ingenua.

El Ataque del Mono Caníbal, se utiliza la teoría de Charles Darwin de manera invertida, y se resaltan los sentimientos patrióticos que luchan hasta agotar el último recurso, contar de no dar el brazo a torcer ante el invasor.

Héctor y la Fábrica de Habichuelas con Dulce, es una novedosa versión dominicana y terrorífica de la novela infantil de Roald Dhal “Charlie and the Chocolat Factory”, en la cual un simple recorrido por las instalaciones de una fábrica del famoso postre dominicano se transforma en un alucinante y horrendo viaje.

The White Page, el autor copia la polémica y misteriosa técnica de Joaquín Balaguer y decide dejar una página en blanco al final del libro, con la intención de que el lector concluya el material a su manera o simplemente demostrando que en el futuro podría aparecer una segunda parte.

En todas las historias que aparecen en esta obra, unas 18 en total, se encuentran lecciones de una sociedad muy especial como la dominicana, algunas de ellas curiosas, jocosas e increíbles, pero que se pueden comprobar en la cotidianidad.

En lo particular, la historia que me pareció más conmovedora y fotográfica fue la que se refiere a la cárcel de menores, en el entendido de que es un paseo, entiéndase desagradable, pero con todos los detalles, de las realidades que viven estos centros, en los cuales seres humanos han perdido el sentido de la vida y sobreviven aferrado a una esperanza que no parece irradiar sus sueños.

El autor de esta obra, David Frías, es un joven talentoso que conocí en la Universidad Dominicana O & M. Jamás imaginé que una mente tan precoz podía estar adornada de tanta capacidad de imaginación y que pudiera sobrevolar temas que no son del dominio común y, quizás, hasta de asombro para muchos intelectuales.

Las pretensiones del novel escritor es poner en manos de los lectores, en un lenguaje sencillo y crudo, un relato de historias cargadas de ficciones que reflejan casos extraños, homosexualismo, lesbianismo, aventuras, historias, cronologías y otros temas que no son de la cotidianidad.

-13 de febrero de 2010.